Hoy un post corto, pero jugoso.
O sea, rico en valor y sustancia, si y solo si lo sabes apreciar.
Si no, posiblemente te resultará seco e insípido.
Al lío.
Grábate esta frase en tu agenda y léela por lo menos una vez a la semana:
«El vendedor también forma parte del producto.»
De tu producto o servicio.
Lo quieras o no.
Y como tal puede aportar un valor adicional con su actitud y aptitud que le diferencie de la competencia.
En el panorama actual donde todos los productos se ven casi iguales, con pocas diferencias, por encima de precio y marca, es importante resaltar el valor adicional que puede proporcionar el vendedor profesional.
Un vendedor que inspire confianza y seguridad en el cliente, siendo él el valor diferencial, sobre todo si es un experto en lo suyo.
Así pues, asegúrate de que:
- Tus vendedores tengan la actitud necesaria para querer ayudar y asesorar al cliente.
- Tus vendedores sean ante todo profesionales. Los clientes volverán por la diferencia que supone un vendedor así.
- Tus vendedores estén formados en ventas y en consecuencia puedan lograr excelentes resultados.
Dicho de otra forma, no solo cuides con mimo tu producto, no solo te preocupes por la calidad, por el empaquetado, por su diseño, etc., sino también en la misma medida, por la otra parte del producto que son también tus vendedores.
Los que posiblemente dejen una huella imborrable en tu cliente.
Para bien. O para mal.
Inspira primero a tus vendedores.
Inspiralos para dar un servicio extraordinario a tus clientes.
Y así vender más y mejor.
Al respecto, aquí tienes una pequeña ayuda para tus vendedores.
- VIDA Y MUERTE DEL PRODUCTO
- VENTAS CON CORAZÓN
- VENDER CON VALENTÍA NO ES SUFICIENTE
- VENDEDOR, NO TE PIERDAS EN LAS REDES SOCIALES
- VALOR VS. PRECIO
- UNO DE LOS MEJORES VENDEDORES DEL MUNDO